Mayo 2005 Archives

Por favor...

| 1 Comment

En nuestra Ley No Escrita De Urbanidad, uno de los elementos estrella es la expresión "por favor" (en otros mundos, también conocida como "please" o "bitte"). El significado, o mejor dicho, la aportación enfática de dicha locución es conocida por todos/as, así que reservaré mi retórica a otras argumentaciones.

Es indiscutible que la connotación de la expresión que nos ocupa es, en el sentido del buen o mal rollo, positiva. Es decir, no podemos recriminar a nadie el incluir un "por favor" en su alocución por resultar de mal gusto o improcedente. En algunos casos sirve incluso para embellecer una frase, o para proporcionar mayor cortesía.

Sin embargo, a pesar de la bondad que pueda transmitir intrínsecamente la expresión "por favor", si desviamos nuestra mirada hacia el contexto de la frase, observamos como su uso se hace necesario únicamente en situaciones no excesivamente ventajosas; algunas son penosas e incluso dramáticas. Cuando pedimos auxilio, cuando necesitamos que nos hagan un favor, cuando queremos aportar ironía a una orden, etc.. De la misma forma, el utilizar la expresión de marras puede resultar igualmente incómodo para quien pronuncia la frase como para su receptor; no sólo recibe la humillación el suplicante.

Por tanto, la próxima vez que escuchen un "por favor", analicen fríamente el contexto antes de establecer juicios irracionales acerca de connotaciones aventuradas.